domingo, 1 de mayo de 2011

Tertulia con el candidato del PP

Habíamos quedado en presentar un resumen con los resultados de las charlas que mantendríamos con cada uno de los candidatos a las elecciones municipales del 22M, disculpar porque vamos algo retrasados. Hace dos semanas estuvimos hablando con Constantino Álvarez del Partido Popular y con Carmen otra militante de la misma agrupación política.
Durante la reunión abordamos los asuntos culturales de su programa y el Centro Niemeyer, y sorprendentemente empezamos hablando de urbanismo, ¿curioso verdad? Pero no deberíamos sorprendernos porque la cultura forma parte de un todo interconectado, es el gran mercado el del pensamiento único, y claro al pertenecer a ese universo la cultura también forma parte del urbanismo y viceversa. Ya nada existe al margen de PGOU, la cultura en estado puro es una entelequia. Hoy todo está vinculado y relacionado. Por eso hablamos del PGOU y de las modificaciones que se harán al uso terciario de las parcelas en torno al centro Niemeyer. Según nos contó Constantino, el PP quería participar en el proceso de organización del Centro Niemeyer y el PSOE les propuso un pacto. La condición que les pusieron en el grupo municipal socialista para que el PP local participase, fue su voto para modificar en el PGOU el uso hasta entonces exclusivamente terciario, de los terrenos de unas parcelas cercanas al Centro Niemeyer y a la Isla de la Innovación para uso residencial. Y esto fue lo pactado en un acuerdo que según nos informan, sólo se refleja en la memoria de los involucrados y cuyo cumplimiento no es obligado por ninguna instancia legal, ya que es un pacto de caballeros, y de damas, imagino. Con estas alforjas se unió el PP al equipo de trabajo municipal que durante meses conoció, analizó y propuso ideas, hechos y proyectos en torno a los avances y retrocesos del equipo de gestión del centro cultural. Todos sabemos que participar en cualquier proceso es un verbo que implica el compromiso de aportar por una parte y por la otra la capacidad de escuchar activamente al otro y manifestar cierta empatía. Participar es opinar, debatir y aportar, incluso criticar y disentir forman parte de esa enriquecedora y democrática actividad participativa, pero según el candidato del PP a la alcaldía, el grupo socialista no cumplió su parte del pacto. Durante meses no hubo ninguna sesión de trabajo en la que se permitiera esa participación y por el contrario sus propuestas se ningunearon y sus aportaciones eran descalificadas sin darles argumentos, sin debates. Sus planteamientos ni se discutieron, ni fueron tomados en cuenta. Al no aceptar ninguna de sus propuestas respecto al Centro Niemeyer, el grupo municipal del PP entendió que aquel pacto de caballeros y damas estaba roto.
Luego hablamos del Centro Niemeyer y Constantino dijo que el centro cultural necesitaba vertebrarse con la ciudad, hacer sinergias y potenciar sus principales valores patrimoniales, como es el casco histórico. También critico que se hubiera hecho un uso partidista del centro cultural por la presencia de Felipe González. Hablamos de la programación del centro y de la ausencia de un Plan Director que explicara a dónde va el centro, cuáles son sus objetivos, qué estrategias y que metodología va a seguir para lograr sus metas. Un plan director que defina un modelo de intervención en la ciudad, que de verdad genere una industria cultural, y establezca sus alianzas, las posibles sinergias. Un plan director que refleje esos proyectos compartidos con la ciudad, con sus comerciantes, con las industrias de la zona, con los empresarios, con el tejido asociativo local. También se habló de la cancelación de la Bienal de Arquitectura Iberoamericana, que en su día anunciaron Natalio Grueso y Carmé Chacón, cuando era Ministra de Vivienda, que albergaría el Centro Niemeyer, y que nunca se nos dijo por qué se hizo en Madrid. También se comentó la decisión de mandar a una empresa de Gijón para que confeccionase el mural de cerámica que diseñó Óscar Niemeyer, y del malestar que esto provocó entre algunos alumnos de la Escuela de Cerámica de Avilés. También salió el tema del voluntariado. Les llamó la atención que el Centro Niemeyer aún no hubiera establecido con esta asociación ningún convenio. Nosotros también hablamos de ACCIÓN, de nuestro orígenes, de lo que habíamos hecho en el pasado y de nuestro proyectos de futuro. Hicimos énfasis en la importancia del voluntariado, desde la iniciativa ciudadana, no desde el dirigismo cultural y les presentamos la teoría de las ciudades creativas, de Charles Landry y de Richard Florida, que no conocían y que les pareció muy interesante.